Agradezco profundamente este premio, y os podéis imaginar que para mí una de las causas que siempre entendí como fundamentales era llevar los derechos allí donde se habían negado; llevar la libertad allí donde se había prohibido; eliminar los prejuicios allí donde se había marginado a tantas personas, y convertir una democracia en ciudadanía plena de plenos derechos. Por ello, recibir este premio es un gran honor y satisfacción.
Si uno mira con perspectiva la historia, diremos que aún estamos empezando, estamos empezando, pero el convencimiento que quiero trasladaros hoy es que ese comienzo, es un comienzo fuerte y sólido, y será un proceso imparable. Llevamos apenas unas decenas de años en nuestro país, muy pocos para que la lucha por la igualdad de género y el reconocimiento de los derechos de personas con discapacidad se convierta en lo que dice la Constitución en algo efectivo.
Siempre recuerdo ese artículo 9 de nuestra Constitución, que mandata a los poderes públicos a remover los obstáculos para que los derechos fundamentales sean efectivos, todos los obstáculos, por ello hay que luchar, hay que luchar, y hacerlo bien.
Debo deciros que para mí ha sido un honor ser invitado a formar parte del patronato de la Fundación Mujeres CERMI, primero porque casi me recuerda a los consejos de ministros, donde había más mujeres que hombres casi, o por lo menos la mitad, y siempre en ese ambiente se trabaja mejor, lo he explicado en muchas ocasiones.
La semana pasada estuve en Cabo Verde, en una misión de la Unión Europea sobre Igualdad de Género, lucha contra la violencia de género, y regulación de las empleadas de hogar, que es uno de los temas también que legislamos, y donde hay una gran discriminación, y un gran cinismo social. Y había unas asociaciones de mujeres de lucha contra la violencia de género valientes, una presidenta que era valiente, Ana, como tú, como tú de estupenda, y bueno, me hicieron socio, por cierto ,de la asociación de lucha contra la violencia Cabo Verde contra la violencia de género.
Hablábamos fundamentalmente de violencia de género, allí tienen una buena ley, pero en cuanto a la implementación, me dicen, yo si fuera ustedes, haría una cosa, asociaciones de mujeres, y saldría a los medios de comunicación, y diría: "no votaremos jamás a un político que no se declare feminista, porque si algo tiene sentido en la política es el cambio de la mayor injusticia y discriminación, y la mayor desigualdad que ha habido en la historia, la que han sufrido las mujeres".
Y si a esa discriminación histórica se le pone la mirada de la discriminación de personas con discapacidad, pues la discriminación la desigualdad, la falta de derechos, sin ninguna razón, ni en nombre de ningún principio de mujeres con discapacidad, es aún mucho mayor.
También en Cabo Verde, pero lo he dicho en más sitios, creo que Carlos Marx se equivocó, que la historia de la humanidad no es la historia de la lucha de clases, ni la historia de la dominación del hombre por el hombre, sino que la historia de la humanidad, realmente, ha sido la historia de la dominación de las mujeres a mano de los hombres. Esa es la constante mayor de la historia y, por tanto, lo más transformador, la palanca mayor de cambio es, sin duda alguna, la igualdad de género, eliminar toda discriminación, y hacer efectivos todos los derechos, y mucho más de mujeres con discapacidad.
Ana sabes que estoy muy contento de estar en el patronato, no hay ningún tiempo mejor de mi vida que pueda dedicar a ayudaros a transmitir la sensibilidad que supone, y pedir apoyos. Debo pediros que seáis prudentes a la hora que pueda generar apoyos, y la actividad del patronato, y la fundación que, por supuesto, tenemos que hacer algo de especial significado en este contexto de lucha por la igualdad de género, en contra de las discriminaciones, y el acoso que tiene fuerza social en todo el mundo.
Tenemos que abrir la mirada, y la ventana, lo hago todos los días en las conversaciones que tengo, en ese campo tan injusto, doblemente injusto, que es lo que parece la falta de oportunidades y derechos de mujeres con discapacidad. Hay que abrir ese campo, y el día 8 estaré con vosotras a las cinco y media.
Me ha emocionado este premio. Lo agradezco de corazón, porque la tarea es de las que merecen la pena. Y voy a confesar una cosa: mis hijas se sienten muy orgullosas, y esto para mí es lo más importante, gracias.
